Según su origen.
Las
hemorragias se pueden clasificar en función de varios criterios como
su origen, localización y gravedad. Así según el origen podemos
hablar de hemorragias arteriales, venosas y capilares.
CLASIFICACIÓN
SEGÚN SU ORIGEN
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Tipo
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Características
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Arterial
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En
las hemorragias arteriales la sangre es de color rojo vivo (por su
riqueza en oxígeno) y sale a borbotones y de forma rítmica
siguiendo el latido del corazón. Ha que tener en cuenta que las
arterias llevan a los tejidos la sangre que sale del corazón y lo
hacen con mucha presión, por lo que si el vaso arterial dañado
es una arteria principal el paciente puede perder mucha sangre y
como consecuencia entrar en shock y morir.
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Venosa
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En
las hemorragias venosas la sangre es de un color más oscuro (es
pobre en oxígeno) y sale de forma continua, lenta y uniforme. Las
venas devuelves desde los tejidos la sangre al corazón, en su
interior la sangre viaja a baja presión, por lo que este tipo de
hemorragias suele ceder con una simple presión en la zona de
sangrado.
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Capilar
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En
las hemorragias capilares la sangre es de color rojo vivo y sale
muy lentamente, extendiéndose progresivamente por toda la
superficie de la piel, de ahí que se les suela llamar hemorragias
en sabana. Los capilares son los vasos sanguíneos más numerosos
y pequeños del organismo y llevan a las diferentes capas de la
piel los nutrientes y el oxigeno destinado a las células que lo
forman. Este tipo de sangrados ceden habitualmente por sí solos
debido a la acción de los mecanismos de coagulación. Es la
llamada hemorragia en sabana.
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Según su localización.
Hemorragia
interna: Es la ruptura de algún vaso sanguíneo en el interior del
cuerpo.
Hemorragia
externa: Es la hemorragia producida por ruptura de vasos sanguíneos
a través de la piel, este tipo de hemorragias es producida
frecuentemente por heridas abiertas.
Hemorragia
exteriorizada: a través de orificios naturales del cuerpo, como el
recto (rectorragia), la boca vomitando (hematemesis) o tosiendo
(hemoptisis), la nariz (epistaxis), la vagina (metrorragia), la
uretra (hematuria), el oído (otorragia), y el ojo (hiposfagma).
HEMORRAGIA
INTERNA
Una
hemorragia interna es una pérdida de sangre que se produce desde el
sistema vascular en una cavidad o espacio corporal. Se trata de una
emergencia médica grave y el grado de severidad depende de la
velocidad y la ubicación del sangrado ( por ejemplo, cerebro ,
estómago , pulmones ). Potencialmente puede causar la muerte y paro
cardíaco si el tratamiento médico adecuado no se recibe
rápidamente.
Causas
Una
serie de condiciones médicas pueden conducir a una hemorragia
interna . Las causas comunes incluyen trauma, diversos estados
patológicos y las complicaciones de la terapia médica . Los lugares
comunes incluyen el tracto gastrointestinal, la aorta y la hemorragia
intra-craneal.
Condiciones
Patológicas Y Enfermedades
Una
serie de condiciones patológicas y enfermedades puede dar lugar a
una hemorragia interna . Estos incluyen la ruptura de los vasos
sanguíneos como resultado de la presión arterial alta , aneurismas,
varices esofágicas o úlceras pépticas. Otra causa común de
hemorragia interna es el carcinoma (cáncer) , ya sea del tracto
gasto-intestinal, del pulmón , o más raramente de otros órganos
como la próstata , páncreas o riñón . Otras enfermedades
relacionadas con hemorragias internas incluyen el escorbuto,
hepatoma, cáncer de hígado, trombocitopenia autoinmune, el embarazo
ectópico, la hipotermia maligna, quistes ováricos, Deficiencia de
Vitamina K, y la hemofilia y la malaria. Algunos virus pueden causar
un tipo de hemorragia interna llamada fiebre hemorrágica viral,
tales como los virus de Ebola, Marburg o dengue, pero éstas son poco
frecuentes.
Prognosis
La
hemorragia interna es grave por dos razones:
–
El exceso de sangre puede comprimir órganos y causar disyunciones
(como puede ocurrir en hematoma)
–
Cuando el sangrado no se detiene espontáneamente , la pérdida de
sangre causará choque hemorrágico, que puede conducir a daño
cerebral y la muerte . Si hay presión, puede conducir a la muerte o
a una hemorragia cerebral .
HEMORRAGIA
EXTERNA
Se
produce cuando, además de romperse el vaso sanguíneo, se corta la
piel y la sangre derrama al exterior.
Definición
Por
afectar la integridad de la piel, se produce la salida de sangre, lo
que ocasiona la hemorragia y potencialmente la herida
puede infectarse secundariamente.
Manifestaciones
Según
el diámetro del vaso que se vea afectado, será la intensidad del
sangrado, pudiéndolas dividir en:
Hemorragia
Capilar o Superficial:
Compromete
solo los vasos sanguíneos superficiales que irrigan la piel;
generalmente esta hemorragia es escasa y se puede controlar
fácilmente.
Hemorragia
Venosa:
Las
venas llevan sangre de los órganos hacia el corazón; las
hemorragias venosas se caracterizan porque la sangre es de color rojo
oscuro y su salida es continua, de escasa o de abundante cantidad.
Hemorragia
Arterial:
Es
un sangrado que por tener alta presión adquiere características
espectaculares, generando temor al accidentado y a quien esté
encargado de realizar los primeros auxilios. Las arterias conducen la
sangre desde el corazón hacia los demás órganos y el resto del
cuerpo; la hemorragia arterial se caracteriza porque la sangre es de
color rojo brillante, su salida es abundante y en forma intermitente,
coincidiendo con cada pulsación. (tener siempre en cuenta que con la
compresión de la zona se detiene invariablemente el mismo)
Síntomas
De Hemorragia Externa (HERIDA Abierta) Y Hematomas
El
shock de estos dos tipos de hemorragia puede causar los siguientes
síntomas:
–
confusión o pérdida de la lucidez mental
– piel fría y
humedecida
– vértigo o mareo luego de sufrir la lesión
–
descenso de la presión arterial
–
palidez
– aceleración del pulso y su consiguiente aumento de
la frecuencia cardiaca
– debilidad
HEMORRAGIA
EXTERIORIZADA
Son
aquellas hemorragias que siendo internas salen al exterior a través
de un orificio natural del cuerpo: oído, nariz, boca, ano y
genitales.
Hemorragia
de oído
Las
hemorragias que salen por el oído se llaman otorragias. Cuando la
pérdida de sangre es abundante y previamente ha existido un
traumatismo (golpe) en la cabeza, el origen de la hemorragia suele
ser la fractura de la base del cráneo.
Hemorragias
de nariz
Las
hemorragias que salen por la nariz se denominan epistaxis. El origen
de estas hemorragias es diverso, pueden ser producidas por un golpe,
por un desgaste de la mucosa nasal o como consecuencia de una
patología en la que la hemorragia sería un signo, como por ejemplo
en el caso de la hipertensión arterial (HTA).
Es
cierto que muchas personas consideran la epistaxis como un suceso
normal, explicación que el socorrista no debe aceptar, pues el ser
humano no está constituido para sangrar de forma habitual y
«normal».
Hemorragias
de la boca
Cuando
la hemorragia se presenta en forma de vómito, puede tener su origen
en el pulmón (hemoptisis) o en el estómago (hematemesis). Es
importante distinguir su origen para así proceder a su correcto
tratamiento, para ello hay que tener en cuenta el siguiente cuadro.
HEMOPTISISHEMATEMESIS
Vómito
precedido de tos.vómito precedido de náuseas.
sangre
limpia, con olor a óxido.sangre con restos de alimento y
maloliente.
puede
tener aspecto espumoso.puede acompañarse de inconsciencia.
Actuación:
Control
de signos vitales
Dieta
absoluta
Evacuar
en posición de P.L.S.Actuación:
Control
de signos vitales.
Dieta
absoluta.
- Evacuar
en posición de semisentado.
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Hemorragias
del ano
Atendiendo
al aspecto en que se presentan las heces, podemos determinar el
origen de estas hemorragias. Son de origen digestivo cuando las heces
son de color negro (melenas) y de origen rectal cuando las heces se
presentan con sangre normal (rectorragia). Tanto en un caso como en
el otro se procederá a recomendar la consulta médica por personal
especialista.
Hemorragias
vaginales
Durante
el período de gestación, la mujer no debe presentar ningún tipo de
hemorragia vaginal (metrorragia). Su presencia podría indicar la
amenaza de aborto, por lo que se debe conseguir un reposo absoluto
(estirarla) por parte de la mujer y evitar que siga perdiendo sangre.
Para ello colocaremos compresas externas sobre la vagina (sin
introducir nada dentro) y cruzándole los pies los elevaremos en
espera de su traslado en ambulancia a un Hospital.
Según la gravedad.
LEVES:
Cuando el volumen de sangre perdido llega hasta los 750ml. El herido
suele estar tranquilo, respirando un poco rápido pero con una
frecuencia cardiaca que no pasa de los 100 lpm (latidos por minuto)
GRAVES:
Cuando el volumen de sangre perdida oscila entre uno y dos litros. El
paciente está confuso, con respiración agitada y frecuencia
cardiaca que puede llegar a los 140 lpm.
MUY
GRAVES: Es una situación de importante riesgo vital. El volumen de
sangre perdido puede pasar de los dos litros, casi la mitad del
contenido en sangre total del organismo. El paciente está como
desconectado de lo que le rodea, con respiración jadeante y la
frecuencia cardiaca supera los 150 lpm.